Aristóteles (384 – 322 A.E.C.)

Aristóteles nació en Estagira, fue enviado a Atenas y estudió en la Academia de Platón. Tras la muerte de Platón, Aristóteles decidió abandonar Atenas y posteriormente, el rey Filipo II le confió la educación de su hijo, el cual pasó a la historia como Alejandro Magno.

Alrededor del año 336 A.E.C. vuelve a Atenas y funda su propia escuela, conocida como “el Liceo”. Contrario a las doctrina platónica, en la filosofía aristotélica, las experiencias son la fuente del conocimiento más confiable. En consecuencia, esta diferencia de pensamiento determinó la orientación de la teoría del conocimiento de Aristóteles, y la forma en la que se realizan las ciencias, así, llegó a ser reconocido como el padre fundador de la lógica y de la biología.

Algunas de las aportaciones más importantes de Aristóteles son: la teoría de la generación espontánea, la sustancia, el motor inmóvil, el acto y potencia, el principio de no contradicción y las nociones de categoría,

Aunque se le acredita a Aristoteles la creación del término “Metafísica”, se piensa que esta palabra realmente tiene su origen a partir de una traducción hecha hasta el siglo 1 E.C. Según la metafísica aristotélica, es esta la teoría de los principios generales del pensamiento, también nombrado “la ciencia primera”. En el libro IV de la Metafísica, se nos expresa esto con la famosa frase “hay una ciencia que estudia lo que es, en tanto que algo que es y los atributos que, por sí mismo, le pertenecen” (Metafísica, IV, 1003a21-22)